Bueno, bueno.....que linda salida que nos mandamos ayer
Les quiero agradecer a los que participaron, ya que me hicieron pasar un día excelente
Hacía más de dos años que no ruteaba, y el bautismo rutero de la Vulcanita me tenía preocupado, pues el salir a la ruta con una moto "nueva" de 20 años siempre puede traer algún contratiempo, y la verdad es que no quería arruinarle el paseo a nadie con algún desperfecto que pudiera ocasionar mi moto
Pero gracia a Dios todo anduvo de 10 desde que salimos de Ciudadela y el regreso
Lo que cuento sobre algún desperfecto, lo digo porque el sábado a la noche la cosa se había puesto heavy con la Vulcanita, ya que no quiso arrancar. Después de 10 días sin usarla, la batería estaba muy floja y no hubo forma de hacerla arrancar. No tenía ganas de desarmar todo, así que le puse el cargador sin sacar la bata. Le puse uno de los cocodrilos en el polo positivo, y como el otro que iba al negativo entraba medio justo y no quería hacer un corto, fui a buscar en el garaje, otro más chico. No tardé más de 15 segundos, y cuando vuelvo al la de la Vulcanita siento olor a quemado. "Paro" el oído y siento un ruido a burbujeo de agua que venía de la batería. Sin pensarlo dos veces trato de sacar el cocodrilo del borne positivo, y me quemé los dedos. Igual me la aguanté y lo pude sacar después de un par de intentos. No sé que pasó, ya que me había fijado de que el cocodrilo no quedara tocando nada, y además el cargador todavía no estaba enchufado a la corriente eléctrica. Pero bueeeeee.....me puse a sacar la batería rogando que no se hubiese puesto en corto ni que se hubiese quemado nada más. La dejé cargando y mientras tanto me fui a buscar las alforjas para ponerlas. Cuando las encuentro veo que las dos tenían las presillas de sujeción rotas. Así que me las puse a coser. Pero como el coser no es mi fuerte, tenía miedo que en la ruta no aguantara la costura y perderlas por el camino.
Y bueeeee....llegó el domingo a la mañana, y después de pegarme un baño y vestirme, me puse a armar a la Vulcanita, mientrar rezaba para que todo funcionase.
Le puse la batería, le conecté todo, le puse el asiento y le dí arranque...... ¡¡¡¡ Arrancó al toque !!!!....Yuuupiiiiii.....
Así que bueeeeee....terminé de cargar las alforjas, y por las dudas las sujeté con unas lingas de goma para evitar que llegado el caso que se desprendan, no ocasionar un bardo en la ruta.
Salí rumbo al punto de encuentro y al llegar ya estaba Enrique y Claudio. Nos tomamos un cafecito y al rato llego Juanca. A la hora fijada, nos subimos en nuestras máquinas y salimos a un buen ritmo hacia el punto de encuentro con Oscar, que al llegar ya nos estaba esperando ansioso.
Paramos unos 15 minutos allí para otro cafecito, recargar combustible (en Ciudadela no había nafta, así que no queríamos tener el mismo problema en otra) y una pasada por el baño (los años nos pone viejos y nos achica la vejiga....jajajaja)
Nos volvimos a subir en las motos, y gracias a que el asfalto de la ruta estaba muy bueno, pusimos el cuentamillas en 80 y así hicimos casi todo el recorrido
Había mucho viento, y eso molestó bastante, sobretodo en un momento que íbamos transitando una curva y el viento cambió abruptamente de lado
Pero bueeeeee....llegamos a Pipinas sin ningún inconveniente, y yo más que contento porque la Vulcanita se había portado de maravillas y mucho más por haberme dado cuenta que mis dotes de costurero habían rendido frutos, por haber llegado sin haber perdido ninguna de las alforjas reparadas.
Apenas llegamos cargamos nafta para ya tener preparadas a las "chicas" para la vuelta
Ahí lo vemos a Oscar junto a otro viajero con una Harley
Estuvimos allí en la estación de servicio hasta que llegaron nuestros "anfitriones", y mientras tanto aprovechamos a retratar a nuestras chicas
Y después nos metimos en una parrilla, que como podrán ver detrás de la vidriera, tenía algo que nos inspiró a entrar....
Nos comimos todo un asadazo que estaba de primera, y como muchachones responsables evitamos tomar vinito (el asado se lo hubiese merecido, pero bueeeee....)
Estuvimos allí comiendo y charlando, hasta que vimos que la tarde ya estaba bastante avanzada, así que emprendimos la vuelta
La vuelta fue sin problemas al igual que la ida, aunque algunos tramos de la autopista BsAs/La Plata estaba muy pesada
Nos fuimos separando a medida que íbamos llegando a puntos cercanos a casa, y por mi parte, unos minutos después de las 18 hrs ya estaba en mi destino sufriendo viendo a Racing
Quiero volver a agradecer la buena onda imperante durante todo el día, y ya estoy esperando ansioso el próximo viajecito a Tandil. Ojalá se prendan algunos más
Bueno....después seguramente alguno subirá alguna fotucha de la mesa, ya que yo no saqué ninguna de ese momento
Les dejo un abrazo para todos
Ricky Roll The Bones